lunes, 11 de agosto de 2025

El Dios de los humildes: Judit

Escojo hoy una cita del Libro de Judit, que junto a Ester y Rut componen los tres libros de la Biblia que tienen como protagonista principal a una mujer. Es el más largo de los tres, con 16 capítulos a través de los cuales se nos narra una preciosa historia sobre la confianza en Dios frente al orgullo y la prepotencia humanas. A través del pensamiento y la acción de Judit se nos hace ver la actuación de la providencia divina en momentos de máxima desesperación. Una humilde viuda derrotará al todopoderoso Holofernes, valiéndose de sus escasas posibilidades de salir victoriosa. En esta ocasión, la belleza y las dotes seductoras de una mujer sirven para ayudar al pueblo de Israel, al contrario de lo que ocurre con la historia de Sansón y Dalila

Pero antes de convertirse en instrumento de la voluntad divina, Judit eleva a Dios una bonita oración de la que entresaco este versículo que me parece precioso:

Judit 9,11

Porque tu fuerza no está en el número ni tu dominio en los fuertes, sino que tú eres el Dios de los humildes, el defensor de los desvalidos, el apoyo de los débiles, el refugio de los abandonados y el salvador de los desesperados.

lunes, 4 de agosto de 2025

El Dios de la Alianza: Levítico

El Libro del Levítico forma parte del Pentateuco, los cinco primeros textos sagrados de la Biblia. Se centra en la santidad del culto divino, tarea encomendada en exclusiva a la tribu de Leví. Se compone de 27 capítulos de una lectura bastante engorrosa, como cualquier libro de rúbricas litúrgicas. A simple vista puede parecer solo un conjunto de normas, ritos... cultuales y litúrgicas ajenas al cristianismo, pues su noción de sacrificio y sacerdocio están completamente superadas por Jesucristo. No obstante, no podemos olvidar que son la base y el caldo de cultivo para una comprensión de la Nueva Alianza. Es ese sentido deben ser releídas y reinterpretadas.

Para la selección de algunos versículos representativos y provechosos -espiritualmente hablando- me quedo con estos del capítulo 26:

Levítico 26, 11-12 

Yo pondré mi Morada en medio de vosotros y no los rechazaré; siempre estaré presente entre vosotros: Seréis mi Pueblo y yo seré vuestro Dios.